Edén Pastora, La Leyenda
Vida 19/06/2020 07:00 am         


El llamado comandante “Cero", líder de la revolución sandinista, falleció el 16 de junio en Managua, su vida resume al revolucionario latinoamericano



Por Pastor Heydra


Edén Pastora, el legendario comandante “Cero” de la revolución sandinista, murió recientemente en el Hospital Militar de Managua a los 83 años de edad, víctima de una bronquitis, presuntamente provocada por el COVID-19. Lo conocí en 1982 en San José de Costa Rica, en la habitación que ocupaba Carlos Andrés Pérez en la zona donde se celebró la recepción de toma de posesión de Luis Alberto Monge. Yo trabajaba en El Diario de Caracas y CAP me había invitado a una corta gira por Bogotá, Ciudad de Panamá, San José y Santo Domingo. CAP departía con algunos mandatarios regionales y le había escuchado que esa noche vería a Edén Pastora. Al verlo ocupado le solicité me permitiera adelantarme para entrevistarlo. A lo que accedió, mientras culminaba sus compromisos políticos. Me pidió que atendiera al comandante “Cero”, mientras él llegaba. Me acerqué a la pequeña suite y allí lo esperé.

Pastora era un hombre de 38 años, complexión atlética. Lo acompañaba la leyenda de haber comandado el Frente guerrillero del Sur “Benjamín Zeledón”, pero sobre todo el haber dirigido al frente de 25 comandos la toma del Palacio Legislativo de Nicaragüa en Managua el 22 de agosto de 1978. Un duro golpe al gobierno dictatorial de Anastasio Somoza que constituyó un gran triunfo político-militar del sandinismo. De hecho, Somoza cayó unos meses después, el 17 de julio de 1979. Llegó a eso de la 8 de la noche, en dos Mercedes Benz blindados, de color negro. Compartimos un escocés y comencé la entrevista que devino en polémica conversación. Edén Pastora, de tendencia socialdemócrata para ese momento había roto relaciones desde julio de 1981 con Daniel Ortega de tendencia marxista, de fuerte influencia cubana quien presidía la Junta de Gobierno de la Reconstrucción que se inició con una composición plural y de la cual se habían desprendido el Vicepresidente, Sergio Ramírez, el Canciller Miguel D´Escoto y el Ministro de Cultura Ernesto Cardenal.

Observé con detenimiento al destacado personaje. No se habla todos los días con una leyenda viviente ¿Qué había en él de real y de quimérico? La primera impresión no fue la mejor para mi formación de joven soñador, venido de la presidencia de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (UCV). Edén Pastora lucía como principal atuendo en vez de una ametralladora, una pesada cadena con placa de oro macizo sobre su pecho. No me pude contener. Tenía dos símbolos que me hablaban de todo menos de revolución. Los Mercedes Benz y la cadena de oro. Me explicó los de los autos blindados: razones de seguridad, alegó satisfactoriamente. La cadena y la placa de oro son un trofeo de guerra. Una extraña simbiosis. Corajudo, audaz, valiente. Su formación política era incipiente. Luego fundó en 18982 en Costa Rica en la zona fronteriza con Nicaragua su propio movimiento: Acción Revolucionaria Democrática (ARDE) que duró hasta 1986. Hasta que en 2007 apremiado por problemas económicos volvió al redil de Daniel Ortega, quien le dio el dragado del río San Juan. Leyenda controvertida, sus acciones le dieron la fama. Murió en la desconsolada realidad de una cama clínica, adornada de sus quimeras.







VISITA NUESTRAS REDES SOCIALES
© 2024 EnElTapete.com Derechos Reservados