Sin Anestesia
Sin Anestesia
Vida
12/07/2020 08:00 am
Así. Sin anestesia. Noticias, comentarios, rumores. De todo un poco.
ABINADER ALIADO DE GUAIDO
Luis Abinader el candidato del Partido Revolucionario Moderno (PRM) de Repùblica Dominicana y quien se define como socialdemócrata de centro-derecha obtuvo una resonante victoria con el 52,51 % de los voto en la primera vuelta de la consulta presidencial. Economista, formado en universidades norteamericanas, ya había incursionado como aspirante presidencial en la escogencia del 2016 obteniendo cerca de 35 % de los votos; y es disidente del Partido Liberaciòn Dominicana (PLD) que ha cumplido un ciclo de 16 años en el poder con las presidencias de Leonel Fernàndez e Hipòlito Mejìas. La salida del partido el año pasado de Fernàndez quièn ahora se postulò nuevamente ocupando el tercer lugar produjo una fractura en el PLD que obviamente debiò reflejarse en los cómputos del pasado domingo 5 de julio. Las gestiones de sus anteriores gobiernos se destacaron por cuanto la economía dominicana registra el mayor crecimiento de la zona en los últimos años. Abinader, con un estilo moderno, que algunos definen de ”antipolitica polìtica” para diferenciarlo de los conocidos fenòmenos “antipartidistas” de moda en la escena mundial, se propone hacer un gobierno de reformas cercanas a las iniciativas de Estados Unidos y ya como candidato reconoció el año pasado la legitimidad de Juan Guaidò como Presidente Encargado de Venezuela.
DESEO NO BASTA
El deseo o la necesidad de un cambio polìtico es evidente, mas allà de los números de los sondeos e investigaciones de opinión. Sin embargo, la posibilidad de que ello ocurra en el corto plazo o en las venideras elecciones, no pareciera tan factible según los mismos mètodos. Se trata de una tendencia que consagran todas las mediciones y que se atribuye mayormente a que los factores opositores capaces de encarnar y generar esos cambios no despiertan el interès ni la fuerza necesaria para ello. Por ejemplo, en la màs reciente encuesta de Datanàlisis la presión por el cambio es de 83 por ciento pero la posibilidad de que ello pueda ocurrir en el corto plazo es solo del 27 por ciento.
Luis Abinader el candidato del Partido Revolucionario Moderno (PRM) de Repùblica Dominicana y quien se define como socialdemócrata de centro-derecha obtuvo una resonante victoria con el 52,51 % de los voto en la primera vuelta de la consulta presidencial. Economista, formado en universidades norteamericanas, ya había incursionado como aspirante presidencial en la escogencia del 2016 obteniendo cerca de 35 % de los votos; y es disidente del Partido Liberaciòn Dominicana (PLD) que ha cumplido un ciclo de 16 años en el poder con las presidencias de Leonel Fernàndez e Hipòlito Mejìas. La salida del partido el año pasado de Fernàndez quièn ahora se postulò nuevamente ocupando el tercer lugar produjo una fractura en el PLD que obviamente debiò reflejarse en los cómputos del pasado domingo 5 de julio. Las gestiones de sus anteriores gobiernos se destacaron por cuanto la economía dominicana registra el mayor crecimiento de la zona en los últimos años. Abinader, con un estilo moderno, que algunos definen de ”antipolitica polìtica” para diferenciarlo de los conocidos fenòmenos “antipartidistas” de moda en la escena mundial, se propone hacer un gobierno de reformas cercanas a las iniciativas de Estados Unidos y ya como candidato reconoció el año pasado la legitimidad de Juan Guaidò como Presidente Encargado de Venezuela.
DESEO NO BASTA
El deseo o la necesidad de un cambio polìtico es evidente, mas allà de los números de los sondeos e investigaciones de opinión. Sin embargo, la posibilidad de que ello ocurra en el corto plazo o en las venideras elecciones, no pareciera tan factible según los mismos mètodos. Se trata de una tendencia que consagran todas las mediciones y que se atribuye mayormente a que los factores opositores capaces de encarnar y generar esos cambios no despiertan el interès ni la fuerza necesaria para ello. Por ejemplo, en la màs reciente encuesta de Datanàlisis la presión por el cambio es de 83 por ciento pero la posibilidad de que ello pueda ocurrir en el corto plazo es solo del 27 por ciento.
