Mientras el ex presidente Álvaro Uribe cumple confinamiento judicial acusado de fraude procesal, están en marcha dos iniciativas que enrarecen aun más el clima político colombiano. La senadora Paloma Valencia de su partido “Centro Democrático” ha llamado con aparente apoyo a una constituyente para reformar el sistema de justicia; el presidente Iván Duque se inclina en cambio por una reforma constitucional con el mismo objetivo, mientras tanto crece la presión en medios judiciales por la investigación de las elecciones que hace dos años dieron ganador al actual mandatario considerado como protegido e impuesto por Uribe. 

El ex candidato presidencial de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en 2012 y 20013 Henrique Capriles ya separado de Primero Justicia ha llamado a “destrancar” el juego de cara a las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre; y son frecuentes sus críticas a los partidos opositores e incluso tiene su propia tarjeta de votación “Fuerza del Cambio”. Sin embargo, se ha negado a llamar al voto o declarar su apoyo a la abstención. Al parecer, ahora con el reciente documento de la Conferencia Episcopal Venezolana se espera que anuncie su posición definitiva, la cual es esperada y reclamada por sus partidarios.