En 2019 vino a Venezuela y participó en “Un Canto por la Paz” en la frontera colombo-venezolana como contraparte al festival “Venezuela Aid Live” organizado por el empresario británico Richard Branson en Cúcuta contra el gobierno de Maduro y con la presencia del presidente interino Juan Guaidó.

Allí, Hasél gritó: “sacad vuestras garras de Venezuela”. El 16 de febrero de este año, fue detenido en un juicio por enaltecimiento del terrorismo e injurias y calumnias a la Corona.

Desde entonces son frecuentes las protestas violentas en Cataluña y Madrid en solicitud de libertad para el rapero preso. Incluso un grupo de escritores e intelectuales de varios países, han solicitado su liberación y condenado el objeto de la condena. De esta manera, Hasél ha pasado de protagonista de la música a pretexto político, ya que en el fondo se trata de acciones que revelan la grave tensión política que se vive en España y que toma la causa del rapero como una excusa para confrontar a la Monarquía.

Sería entonces, la expresión de los graves enfrentamientos registrados en los últimos meses en la Península que para muchos podrían significar graves síntomas para activar las costosas huellas de la guerra civil española.